• Todos los vuelos del itinerario
• Tasas aéreas
• Todos los traslados en privado
• 12 noches de alojamiento en PC durante el safari
• 1 noche de alojamiento en régimen de MP en Arusha
• Entradas a los Parques Nacionales
• Safaris indicados en el itinerario en 4×4 privado con guía de habla española
• Agua mineral durante los safaris
• Café / te durante los safaris (en los coches y con almuerzo)
• Libro-Guía para consulta de fauna y flora durante el safari
• Seguro de Viaje
• Mochila de viaje (uno por cada habitación)
• Guía de viaje “Tanzania” de la editorial “Lonely Planet” (una por cada habitación)

• Seguro opcional de cancelación
• Visados
• Bebidas
• Propinas

RESERVA DE SINYA

Uno de los lugares mas privilegiados para tener vistas del coloso Kilimanjaro,  Sinya combina entre sus atractivos, los safaris que ofrece la propia reserva,  donde avistar gran cantidad de fauna, así como conocer de cerca las costumbres Maasai, todo ello bajo la atenta mirada del techo de África.

LAGO NATRON

Fronterizo con Kenya, al norte del volcán Ol Doinyo Lengai, montaña sagrada de los maasais, el salado Lago Natron es sin duda uno de los paisajes más inhóspitos de Tanzania. Las algas que lo habitan le otorgan el color rojizo a sus aguas.  Su alta alcalinidad, debida a las cenizas del vecino volcán,   y su alta temperatura hacen prácticamente imposible la vida en él. Famosas son las curiosas petrificaciones de animales, especialmente aves, que tras probar a sumergirse en sus aguas quedan fosilizados.

LAGO EYASI

El Lago Eyasi situado al sur de las llanuras del Serengeti es un lugar salvaje y sorprendente dónde aún se puede vivir una auténtica aproximación a la forma de vida de algunas de las tribus más fascinantes de Tanzania, destacando principalmente los Hadzabe y los Datoga, tribus que aún utilizan los métodos tradicionales de supervivencia.

P.N. TARANGIRE

Las colinas y laderas del parque, salpicadas por sus característicos baobabs, hacen del Parque Nacional de Tarangire una parada absolutamente obligada y excepcional en cualquier recorrido por el Norte de Tanzania.  El río que lo atraviesa, y que otorga su nombre al parque, concentra a medida que avanza la estación seca grandes manadas de cientos de elefantes que pueblan en gran cantidad el parque y otros herbívoros en sus riberas convirtiéndolo en todo un espectáculo.

P.N. SERENGETI

Serengeti (“llanura sin fin” en lengua swahili), nos muestra toda la fuerza e intensidad de la vida salvaje de la sabana africana. En sus más de 15.000 km² la vida salvaje fluye de forma incesante, siendo hogar de toda clase de herbívoros y depredadores, convirtiendo el parque en el principal atractivo del Norte de Tanzania. Desde su acceso principal, en Naabi Hill, nos encontramos las praderas de Ndutu, hogar en Febrero de cientos de miles de herbívoros que iniciarán mas adelante el fenómeno de la gran migración que les llevará hacia el Norte hasta las praderas de Maasai Mara, en Kenya, para después regresar en un ciclo sin fin. La variedad de sus paisajes, la inmensidad de Seronera y sus kopjes, el corredor Oeste presidido por los ríos Grumeti y Mbalageti, o las sabanas arboladas plagadas de acacias en Lobo, al Norte presiden el fabuloso y sobrecogedor espectáculo de vida salvaje que convierten a este espacio natural en inigualable e imperdible.

ÁREA DE CONSERVACIÓN DEL NGORONGORO

Enclavada al Este del Serengeti, al área de conservación es considerada como la patria maasai, ya que en sus tierras altas encontramos aún auténticos y verdaderos reductos de su cultura, enclavados al pie del Ol Doinyo Lengai, la montaña sagrada del pueblo maasai. Al sur, la imponente caldera del Ngorongoro con sus mas de 20 km de diámetro y por su peculiar entorno y riqueza se convierte por derecho propio en uno de los mejores puntos de todo viaje a Tanzania para la observación de fauna salvaje. Ya que a excepción de jirafas, en el fondo del cráter encontramos casi la totalidad de las grandes especies, incluyendo los cinco grandes (león, búfalo, rinoceronte, elefante y búfalo), de forma estacional. La riqueza de su suelo y puntos como el Lago Magadi o el bosque de Lerai lo convierten en un verdadero jardín del Edén para todas las especies que lo habitan.  Sus tierras altas no ofrecen espectaculares parajes para disfrutar a pie como los cráteres de Olmoti,  Empakai y el famoso trekking por las tierras altas que nos llevará hasta el Lago Natron.